En entornos industriales es muy común encontrase con gran cantidad de obstáculos, desniveles y zonas en las que el tránsito de forma continuada se hace imposible.
En estas situaciones evitar accidentes se convierte en una prioridad, para ello contamos con unas estructuras que ofrecen una solución eficaz ante este tipo de situaciones, los saltos de lobo.
En este post vamos a hablar de por qué estas estructuras son tan importantes en industria y que finalidad tienen, comenzamos.
¿Qué obstáculos encontramos en entornos industriales?
En cualquier tipo de industria, como pueden ser, plantas de producción, naves de logística, plantas de tratamiento o cubiertas en general, podemos encontrar obstáculos que nos impiden caminar por ellas de forma continuada, ya que es común encontrase con elementos como:
- Maquinaria.
- Cintas transportadoras.
- Estructuras.
- Tuberías.
- Rejillas eléctricas.
- Desniveles en el propio diseño.
En este tipo de situaciones se generan zonas inseguras para el paso de operarios y usuarios, generalmente, si no se ha previsto este tipo de situaciones, los trabajadores acaban haciendo un uso indebido del paso sobre estos elementos, generando con ello riesgos de accidente.
Los saltos de lobo nacen de esta necesidad de salvar esos obstáculos y generar entornos de trabajo seguros.
Los saltos de lobo son estructuras metálicas que gracias a su diseño y fabricación permiten hacer una pasarela elevada. Sus componentes son:
- Escalera de subida.
- Plataforma horizontal.
- Escalera de bajada.
- Barandilla de seguridad en los casos en los que el salto de lobo alcanza una altura superior a 500mm.
¿Por qué los saltos de lobo son útiles en entornos industriales?
Estos sistemas de seguridad generan continuidad y permite que los usuarios puedan pasar de un punto a otro del obstáculo sin tener que pasar por encima de los elementos que los ponen en peligro, evitando así imprudencias y los riesgos derivados de ellas.
Pero, no es la única razón por la que estos elementos son tan importantes, veamos que más nos pueden aportar:
- Seguridad para los usuarios: Cabe destacar que esta es la finalidad principal de los saltos de lobo, con estos sistemas protegemos a los operarios e impedimos que puedan pasar por zonas en las que el tránsito pueda suponer un riesgo.
- Facilidad de movimiento: Un entorno de trabajo bien diseñado facilita la labor sin generar rodeos innecesarios, reduciendo así los tiempos que el personal necesita para desarrollar sus funciones.
- Posibilidad de adaptación del entorno: Instalar saltos de lobo permite facilitar el paso sin tener que rediseñar el lugar de trabajo o realizar modificaciones que impliquen costes elevados.
- Cumplimiento de la normativa: Otro aspecto importante es el cumplimiento de la normativa en materia de prevención de riesgos laborales, la instalación de estos sistemas de seguridad evita posibles accidentes y con ello damos cumplimiento a dichas normativas.
- Flexibilidad de fabricación: Como se tratan de estructuras, generalmente modulares, se pueden adaptar a cualquier entorno e incluso reutilizarlas, adaptándolas si surge una nueva necesidad.
- Prevención de riesgos ocultos: No todos los obstáculos o riesgos son visibles, hay otros, que gracias a estos sistemas, podemos evitar, como son calor residual cerca de ciertas zonas o tuberías, riesgos eléctricos o vibraciones que las máquinas pueden transmitir, dificultando la estabilidad del trabajador.
Conclusión
En un principio, un salto de lobo nos puede parecer una simple estructura, pero en realidad es una forma muy eficaz de poder salvar los obstáculos evidentes y ocultos que podemos encontrar en cualquier entorno industrial.
Con ellos, no solo salvaremos desniveles, sino que generaremos entornos de trabajo más seguros, eficaces y podremos dar cumplimiento a las normativas vigentes.
Para seleccionar un dispositivo de forma correcta, que cumpla realmente su función y nos garantice la seguridad necesaria, desde Ypsos Safety recomendamos acudir a profesionales del sector de la seguridad en altura para realizar de forma eficiente la debida evaluación de riesgos, instalación y certificación del sistema.
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